martes, 22 de noviembre de 2011

Día para agradecer







Durante la comida, Leonardo estuvo cerquita de su mamá y su papá. Después, todos practicamos el canto para sacar muy pronto La rama, así que tocamos instrumentos y entonamos las estrofas y el coro.

A Leonardo le gustaron para jugar los pavitos que hizo su bisaCharlie hace algunos años para nosotros. Seguramente que el papá de Randy nunca imaginó quién jugaría con esos adornos.






A cortar el árbol de Navidad





Después de comer fuimos a seleccionar los arbolitos que adornan ahora las casas de los abuelos y de Leonardo. Mientras Pablo cortaba y Alaíde lo ayudaba, yo le expliqué a Leonardo cómo lo hacían, mientras Socorro veía desde lejos. Después, posamos Pablo, Leonardo, yo y Alaíde para la foto que tomó Randy.





En la montaña, fría y con sol









Fuimos todos al Ciclo verde para disfrutar de la montaña, el frío, la niebla y el corte del árbol.


Najú aprovechó para enseñarle a Leonardo cómo brota la resina de los pinos y a ser diestro subiendo y bajando la cuesta de la montaña.


Alaíde y Randy también disfrutaron con la compañía de Leonardo.








miércoles, 9 de noviembre de 2011

Pan y pizza





Nos visitaron Leonardo y Miri, y Randy aprovechó para pedir pizza. Como yo había comprado pan para mamá, también le ofrecí a Leonardo. Él quiso de todo y lo disfrutó, incluidas unas almendras que yo había tostado por la mañana. Cuando terminó, mostró cómo le habían quedado los dientes.





miércoles, 2 de noviembre de 2011

Juegos diversos












Acompañado de su mamá, Leonardo toca el pianito que le presta su Abu. Luego sale a jugar con los globos que todavía quedan inflados. Quiso subirse al columpio-hamaca y que lo cubriéramos con globos, para luego darle vueltas entre su mamá y yo. Terminó jugando con varios que estaban amarrados, así que cuando su mamá se los lanzaba, caían todos juntos, como nube de colores.










Con su papá y su mamá












A Leonardo le gusta mucho escalar a su papá como si fuera una montaña. También disfruta de estar con su mamá y su papá.










martes, 1 de noviembre de 2011

Primer Halloween, cuatro

Leonardo, Miri y Najú.


Primer Halloween, tres













Jugamos todos a echarnos confeti. Luego, él mismo a hacer lluvia de confeti. Le encantó mi sombrero de bruja, así que intercambiamos sombreros. Por último, disfrutó de la escenografía y los regalos que le preparó su Abu. Como la tarde estaba fresca, tuvo que sacrificar su look de pirata por su chamarrita.










Primer Halloween, dos







Los malvaviscos lo vuelven loco, pero también probó una de las calabacitas de pan que hizo su mamá y gajos de mandarina que le preparé.






Primer Halloween, uno












Para celebrar Halloween, Leonardo vino disfrazado de pirata, acompañado de su mamá, cubierta por una capa de telarañas, y su papá, cargando unas calabacitas de pan hechas con Miri.


Randy, oculto detrás de un antifaz café, preparó todo para armonizar con el disfraz de Leonardo: mar, peces tropicales, calamares gigantes... Además, huevos rellenos de confeti y los dulces para que Leonardo no hiciera travesuras.


Por supuesto que el pequeño pirata venía provisto de su recipiente para llevarse los dulces, botín que luego revisó con cuidado. Le encantaron, como siempre, los malvaviscos.