Como no puedo hacer fuerza ni cargar pesado, me tocó ahora ser la fotógrafa de las andanzas de Leonardo con su Abu en los juegos. Al chiquito le encantan, tanto que desde antes de comer quería ir. Afortunadamente, su mamá lo convenció de que después de comer; le ofreció que la primera persona que terminara de comer lo llevaría a los juegos, así que ese premio le tocó a su Abu.
Leonardo disfrutó mucho de ese tiempo, sin duda.
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